04/03/2022 | 06:00
La alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, deberá declarar como investigada por malversación y prevaricación, después de haber sido denunciada por la Asociación para la Transparencia y la Calidad Democrática (ATCD) en relación con una serie de subvenciones concedidas a entidades como el Observatori DESC o Enginyeria sense Fronteres. La ATQD, calificada de ”entidad fantasma” por parte de la alcaldesa de Barcelona, no ha revelado quién son sus impulsores. En su página web no se presenta ningún cargo ni miembro de la entidad, ni tampoco se da ningún detalle sobre la financiación que recibe. El mundo de los Comunes ha acusado a “los lobbies económicos” como Agbar de estar detrás de estas denuncias. Aun así, hay un vínculo del que se ha hablado menos: las relaciones de esta entidad con el PSOE y los socialistas catalanes.
Benítez, de la ejecutiva del PSOE en Granada, ha reconocido que “vamos detrás de la señora Colau”
CRÍTIC ha podido acreditar, mediante documentación pública sobre el caso, el rastreo de redes sociales y el contacto con uno de los implicados, que tres de las personas que han tenido algún vínculo con la entidad son o han sido miembros del Partido Socialista. Se trata de Francisco Luis Benítez, miembro de la ejecutiva del PSOE de la ciudad de Granada; Antonio Martínez Mansilla, que ha militado en el PSOE de Castilla-la Mancha y fue directivo de una empresa pública durante el gobierno de Rodríguez Zapatero, y Martín Miralles, militante del PSC de L’Hospitalet de Llobregat. De hecho, Benítez y Miralles son las dos únicas personas que han aparecido mencionadas a lo largo de los últimos años en los medios de comunicación representando en mayor o menor media a esta entidad.
A pesar de su nombre, se conocen muy pocas cosas de la Asociación para la Transparencia y la Calidad Democrática. La dirección que aparece en la página web corresponde a un piso de la Diagonal de Barcelona donde se alquilan varios despachos; pero, según el Registro de asociaciones del Ministerio del Interior, la sede de la entidad está en un piso de la ciudad de Madrid. No hay teléfonos donde dirigirse, ni consta ningún acto público. En cuanto a su actividad, solo se conocen cinco acciones en cinco años. Por un lado, hay unas enmiendas al Reglamento de participación de Pamplona y una petición de transparencia en Madrid. Por otro, tres querellas: una contra la municipalización del agua del Ayuntamiento de Valladolid y dos contra el Ayuntamiento de Barcelona. Una de estas es la denuncia actual por las subvenciones, y la otra, un pleito de 2018 con el que la asociación impidió que Barcelona tirara adelante una consulta ciudadana sobre varias cuestiones, entre las cuales la municipalización del agua.
Los tres socialistas vinculados a la Asociación para la Transparencia
El primer vínculo de la ATCD con el mundo socialista es Francisco Luis Benítez, miembro de la ejecutiva del PSOE en la ciudad de Granada y responsable del ámbito de smart cities de esta agrupación. También fue el responsable de política internacional de las Juventudes del PSOE entre 1996 y 1999, y director de Cultura de la Diputación de Granada entre 2001 y 2005. En declaraciones a Eldiario.es, Benítez ha explicado que “hace tiempo que vamos detrás de la señora Colau”, pero se niega a revelar quién forma parte de la Junta de la entidad y niega ser el presidente. Aun así, figura como tal en una nota pública difundida en 2017 y recogida por el diario El País. El despacho de abogados que representa a la asociación en la denuncia contra Colau, Luna y Asociados, también es de Granada. Benítez no ha atendido a las llamadas ni a los mensajes de CRÍTIC para la elaboración de este artículo.
No es el único vínculo de Benítez con las entidades y empresas que han denunciado a Colau a lo largo de los últimos años. Como consta en su propio perfil de LinkedIn, este militante socialista es external advisor de la consultoría 3CS Cambios Estratégicos SL, que en 2018 también emprendió acciones legales contra la multiconsulta que lideró la concejala Gala Pin. El mismo Benítez celebró en las redes sociales que las demandas presentadas por esta consultoría pusieran freno a la iniciativa del gobierno de Barcelona en Comú de hacer una consulta ciudadana sobre la gestión del agua. En aquellos tiempos, el PSC no formaba parte del gobierno municipal, después de la crisis abierta entre los Comunes y los socialistas a raíz del referéndum del 1 de Octubre.
La segunda persona del ámbito socialista relacionada con la entidad es Martín Miralles, que aparece como autor de las dos entradas que hay en el blog en catalán de la asociación. También hizo declaraciones para el diario El País, en 2018, en calidad de portavoz de la entidad, para explicar la primera querella contra el Ayuntamiento de Barcelona. Aun así, Miralles explica a CRÍTIC que nunca ha formado parte de la Junta de la entidad y que aquella aparición solo fue “una colaboración puntual” a petición del mismo Francisco Luis Benítez, “que es la única persona que conozco de la ATCD”. Miralles es miembro del PSC en L’Hospitalet de Llobregat. En 2011 ejerció de portavoz de la corriente interna crítica con la dirección de aquel momento, denominada Més PSC.
La tercera pieza que une al mundo socialista con la asociación que ha denunciado a Colau es Antonio Martínez Mansilla. Este jubilado de Ciudad Real, en Castilla-la Mancha, consta como secretario de la asociación en un escrito entregado al Ayuntamiento de Pamplona. De hecho, el documento son las enmiendas al Reglamento de participación del ayuntamiento, que, según la web municipal, entregó después Benítez, siempre en nombre de la asociación. CRÍTIC ha intentado ponerse en contacto sin éxito con Martínez. La agrupación del PSOE en Ciudad Real, a preguntas de CRÍTIC, asegura que ya no les consta como miembro del partido.
Pero lo cierto es que Antonio Martínez Mansilla también fue miembro de las Juventudes Socialistas, tal como acredita en su perfil de Facebook, donde aparece en algunas fotografías coincidiendo con Alfredo Pérez Rubalcaba o Felipe González. Llegó a tener cierta responsabilidad en el partido, trabajando como director general de relaciones institucionales en la Sociedad Pública de Alquiler (SPAVIV), una empresa pública de vivienda creada por Zapatero y que ya no existe, según consta en su página personal de LinkedIn.
Un alto cargo del PSC en Barcelona ha colaborado con la empresa que demandó a Colau
Pero los vínculos del mundo socialista con las entidades y empresas que han demandado a Colau no acaban aquí. Según ha podido acreditar CRÍTIC, Pau Solanilla, actual comisionado de Promoción de la Ciudad del Ayuntamiento de Barcelona, también ha colaborado con 3CS Cambios Estratégicos, la consultoría para la que trabaja Benítez y que denunció a Colau en 2018. A preguntas de CRÍTIC, Solanilla reconoce la vinculación con 3CS, pero explica que se limitó a participar “como ponente” en “una jornada de formación en Córdoba” sobre reputación. Aun así, 3CS define a Pau Solanilla como “nuestro socio”, “colaborador” y “consultor internacional” en un tuit.
En otras publicaciones en las redes, se explica que tienen proyectos conjuntos, y en una fotografía en Instagram se puede ver a Solanilla trabajando desde el despacho de 3CS en Sevilla. Solanilla también ha impulsado otros proyectos junto con José María Zambrano, director de 3CS, como el web sostenibles.org.
Solanilla admite que conoce a las tres personas vinculadas a la Asociación para la Transparencia
Solanilla admite a preguntas de CRÍTIC que conoce a las tres personas del mundo socialista vinculadas a la Asociación para la Transparencia. Aun así, limita su relación a la ”etapa de asociacionismo juvenil”, con referencia al hecho de que los cuatro formaron parte de las Juventudes Socialistas. Benítez explica en su blog que fue presidente de ECOSY, las Juventudes Socialistas Europeas, y Solanilla fue secretario general de la misma organización. El actual comisionado de Promoción de la Ciudad, un cargo con rango de concejal designado por el PSC y dependiente del primer teniente de alcaldía de Barcelona, Jaume Collboni, es consultor político especializado en reputación, y actualmente es también el director de la Fundación Rafael Campalans, el laboratorio de ideas del PSC.